Espadaña del templo de Nuestra Señora de Aránzazu. Es el único templo del siglo XVIII en la ciudad de Guadalajara que conserva sus hermosos retablos churriguerescos, elaborados en madera tallada. Fue construido entre el año 1749 y el 1752 como parte del gran conjunto integrado por el convento de San Francisco y cinco capillas anexas.
¡De maravilla! 😀
Muchas gracias, Manolo 🙂
😀 😀 😀